Qué lindo sería si siempre nos diéramos cosas dulces de comer en vez de decirnos palabras hirientes y ofensivas,¿verdad? Pero las discusiones son inevitables. Y la razón es porque de vez en cuando vamos a tener opiniones diferentes y vamos a estar en desacuerdo.
Esta foto fue tomada en nuestra boda en 1980. Desde entonces hemos aprendido a base de pruebas y errores. Despues de 35 años de casados hemos aprendido una que otra cosa para poder resolver nuestros desacuerdos más rápidamente y efectivamente. Yo no soy consejera matrimonial, pero si he leído varios libros Cristianos, artículos, y he atendido conferencias y seminarios Cristianos para parejas, y aprendido acerca del arte de la unidad y la comunicación.
Cuando mi esposo y yo tenemos algo muy importante que discutir esto es lo que hacemos:
1. ¡Orar! Oramos juntos antes de nuestra plática. Yo también oro antes por aparte para pedirle a Dios que me ayude a saber que decir y que no decir. También le pido a Dios que prepare el corazón de mi esposo para que reciba bien lo que tengo que decirle. Hubieron veces en que se me olvido orar antes y el resultado fue desastroso.
2. Hacemos una cita para reunirnos en la sala sin distracciones alrededor.
3. Ambos nos sentamos y ponemos música instrumental. Hemos aprendido de que no es buena idea discutir mientras ambos estamos de pie, uno en frente del otro. El estar sentados causa una atmósfera más relajada y tranquila.
4. Le digo a mi esposo que se relaje y que me escuche por los próximos cinco minutos sin interrumpirme. Mirando siempre al reloj para no pasarme de mi tiempo.
5. Luego él habla por cinco minutos mientras yo hago un gran esfuerzo en no interrumpirlo, y escucho atentamente lo que él tiene que decirme.
6. Usamos "yo" en vez de "tú". Por ejemplo en vez de decir, "Tú nunca me haces caso" es mejor decir, "Me siento ignorada cuando..." Aprendimos esa técnica en una de las clases de comunicación que tomamos. Es mejor expresar como nos sentimos en vez de acusar a nuestra pareja, y que se pongan a la defensiva.
7. La mayoría de las veces nos hemos dado cuenta que todo había sido un mal entendido. El permitir que cada uno tome su turno de hablar, ha sido la clave para darnos cuenta cual es el problema y resolverlo pronto. Luego alcanzamos una decisión justa en la cual estamos ambos de acuerdo y tratamos de ceder en medio.
Nuestras discusiones en estos casos duran de diez a quince minutos. Fijense como he usado la palabra, aprender en este blog. El aprender a comunicarnos mejor ha sido un proceso con la ayuda de expertos en la comunicación y sobre todo, buscando la sabiduría de Dios y su protección durante nuestras oraciones.
Asi que, ora por tu matrimonio y toma ventaja de todos los artículos Cristianos gratis que encuentres en el Internet. El que yo uso es en inglés y se llama www.familylife.com. También invierte en asistir a la conferencia Cristiana romántica que se llama "A Weekend to Remember" (Una semana para recordar).
¡Que Dios te bendiga!
p.d. Si no eres casado todavía puedes utilizar algunas de estas ideas con tus amistades y familiares.
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